Puerto Vilelas

PUERTO VILELAS: Mujeres Canoeras: La UNNE Asesora Para Regularizar Y Fortalecer Las Acciones Del Grupo

Un proyecto de extensión de la Facultad de Ciencias Económicas de la UNNE trabajó con un grupo de mujeres canoeras de Puerto Vilelas, Chaco, en pos de brindar las herramientas necesarias para regularizar su situación y fortalecer las acciones del grupo, las cuales se orientan a potenciar la actividad pesquera y en especial en visibilizar la labor de las mujeres cuyo sustento principal son  los productos derivados de la pesca.

La agrupación de “Mujeres Canoeras” de Puerto Vilelas nuclea a mujeres pescadoras de la ribera chaqueña del río Paraná, y apuesta a mejorar las condiciones en que se realiza esta tradicional actividad.

La labor se apoya en el empuje de las trabajadoras canoeras, pero en pos de generar acciones para transformaciones favorables para todos los que viven de la pesca y el río.

Teniendo en cuenta esos objetivos, desde la Facultad de Ciencias Económicas de la UNNE se consideró factible contribuir con la formalización de una asociación para potenciar los alcances de distintas acciones que desarrollan.

“El proyecto se propuso trabajar en distintos aspectos con la comunidad de mujeres pesqueras del barrio Tres Bocas de Vilelas, quienes congregadas en una agrupación informal, manifestaron la necesidad de regularizar su asociación, con el fin de poder gestionar algún tipo de financiamiento para su emprendimiento” explicó la profesora Noelia Franchini, referente del equipo de la Facultad de Ciencias Económicas junto al profesor Andrés Roberto Ayala.

Así, la ejecución del proyecto se inició con un relevamiento general, que, entre otros aspectos,  posibilitó identificar que las mujeres realizaban un gran esfuerzo diario para sostener la economía familiar. Mientras sus esposos e hijos se dedican a la pesca, lo recolectado lo consumen dentro de su núcleo familiar, y el excedente es vendido a través de canales precarios de comercialización.

La producción ictícola posee algunas particularidades que influyen directamente sobre su sistema de comercialización, condicionando y estructurándolo. En este sentido se destaca la condición altamente perecedera de los peces, que implica un reducido tiempo de vida útil comercial.

Con estas características observadas del sector, los integrantes del proyecto de la UNNE consideraron necesario el desarrollo de las propuestas que asigne un rol activo a los destinatarios y tomen en cuentas las condiciones en que viven y realizan sus actividades cotidianas vinculadas a la pesca.

 “El trabajo no se realizó de manera unidireccional, acercando soluciones mágicas y estandarizadas,  sino que implicó la comprensión de las condiciones en que viven las mujeres canoeras (pobreza, inundaciones, nivel educativo, etc.) que no admiten soluciones estandarizadas. Se puso el foco en las preocupaciones del grupo concreto de mujeres que tenían la intención de mejorar su condición de vida (de su núcleo familiar) y de su barrio” sostuvieron los referentes de la UNNE.

Por ello, en el marco del proyecto se trabajó de manera conjunta los equipos de docentes, alumnos y mujeres canoeras, promoviendo una visión compartida y una clara misión del negocio que les sirva de guía, definiéndose metas concretas en torno a potenciar las acciones que ya venían desarrollando.

La organización de las actividades se realizó bajo la modalidad de taller, en territorio, pretendiendo generar un mejor vínculo con las actoras.

En las capacitaciones trabajaron intensamente los alumnos de las carreras de Licenciado en Administración, en Economía, en Relaciones Laborales y Contador Público de la Facultad de Ciencias Económicas, acompañados por un profesor especialista en cada una de las áreas temáticas involucradas.

También se logró trabajar sobre herramientas administrativas, organizativas y procedimientos esenciales para realizar sus actividades de manera más eficiente.

Se elaboró material que contenía toda la información necesaria y relevante para el desarrollo de los temas abordados, como ser  administración general, asociaciones y cooperativas, técnicas de comercialización, relaciones laborales y trabajo eficaz en equipo, cuestiones impositivas básicas para emprendedores, entre otras.

“Consideramos que cada una de las temáticas abordadas les dio herramientas a las mujeres de la asociación para entender mejor el medio social y económico, permitiéndoles una mejor administración de su negocio” indicó la referente del proyecto.

Para los integrantes del equipo de la Facultad de Ciencias Económicas, gracias al proyecto se avanzó con las pautas generales y necesarias para que las participantes puedan lograr la formalización de la asociación civil, cumpliéndose así con los requerimientos planteados inicialmente por las ellas.

Consideran que luego de la intervención, quedó un grupo mucho mejor organizado y con una visión sobre los desafíos futuros que deben afrontar para alcanzar sus metas.

El proyecto representó un aporte en el campo de la cooperación, el asociativismo y la formación de capital social que contribuya a la preservación del medio ambiente y a la mejora del bienestar de la comunidad.

Destacan que en las mujeres canoeras se vio una clara toma de conciencia sobre la potencialidad que logran asociándose para poder enfrentar desafíos, que no podrían hacerlo como personas o familias aisladas.

 “Creemos que ellas pueden ser emprendedoras exitosas, ya que tienen una fuerte motivación para salir adelante y cuentan, a metros de sus casas, con el rio Paraná, fuente casi inagotable de riqueza natural” destacó Franchini.

ALCANCES DE LA INICIATIVA

Los referentes del equipo de extensión, señalaron que para la Facultad de Ciencias Económicas de la UNNE el proyecto de trabajo con mujeres canoeras permitió canalizar la voluntad de la comunidad educativa de contribuir al esclarecimiento de los problemas y necesidades de la región.

También contribuyó a la labor docente de propiciar la formación integral de los estudiantes, promoviendo valores de solidaridad, compromiso y responsabilidad social a través de su participación en proyectos sociales concretos.

En tanto, para los estudiantes universitarios la experiencia significó una retroalimentación, que como actividad extramuro les permitió acercarse a la realidad que lo circunda.