Caso en el que el Poder Judicial Chaqueño ha denegado el acceso a justicia a una familia entera cuando dejó impune el homicidio de Amanda Encaje hace más de 25 años, es que solicitamos al Estado Chaqueño que no persista en esa posición.
Planteamos la necesidad de transformar las prácticas judiciales y políticas que profundizan situaciones de discriminación y desigualdad al momento del dictado de sentencias, siendo las mismas irrisoriamente leves cuando se trata de personas acomodadas de la sociedad y más gravosas cuando se trata de personas de bajos recursos.
Solicitamos como victimas indirectas del homicidio de nuestra hija, poder acceder a una sentencia JUSTA y no solo ajustada a derecho, a una sentencia que sea ejemplificativa para el resto de los ciudadanos y ciudadanas, pero sobre todo para el homicida de Jessica Vasconcelo, Juan Gilberto Nuñez Barua. También solicitamos, imploramos que al momento de dictar la nueva sentencia no tengan en cuenta las influencias de este hijo del poder, sobrino de comisarios y funcionarios políticos de alto rango. Solicitamos justicia para que nuestra hija pueda descansar en paz, para que nuestras nietas sepan que se puede confiar en la Justicia de nuestra provincia y que vean que el asesino de su mamá va a cumplir una pena por haberle quitado la vida.
Nos gustaría poder decirle a nuestras nietas que la lucha incansable que llevamos adelante desde hace más de cuatro años tuvo sentido, que se hizo justicia por el asesinato de su mamá.
Desde el 21 de enero del 2016 todos los seres queridos de Jessica venimos llevando adelante una lucha incansable, pedimos justicia por el asesinato de mi hija Jessica Vasconcelo.
El 21 de enero del 2016 Juan Gilberto Nuñez Barua atropelló con una camioneta Hilux a mi hija Jessica de 31 años, que viajaba en moto junto con su pareja a quien le quedaron graves secuelas físicas (perdió un riñon, el baso, quedó con problemas motrices – entre otros- ).
Años después, luego de exhaustivas idas y vueltas judiciales, Nuñez Barua, fue condenado con una pena irrisoria que para nosotros significo una falta de respeto por parte del Estado chaqueño, sentimos que se nos burlaron en la cara. Por eso es que hemos llegado hasta el Superior Tribunal de Justicia de nuestra provincia solicitando que la pena sea de cumplimiento efectivo, que esta persona pague el precio por haberle quitado la vida a una chica alegre de 31 años, que tenía dos hijitas por las que se desvivía.
Hace menos de un mes Barua volvió a conducir de manera peligrosa e irresponsable, manejando a contramano por la avenida avalos (altamente transitada), poniendo en riesgo la vida de una madre y su hija a las que casi enviste si no fuera por una rápida maniobra de esta última.
Evidentemente Nuñez Barua pese a haber sido condenado en primera instancia judicial, no aprendió. No entendió que con su accionar peligroso destruyó a una familia entera, que dejo a mis nietitas sin su mamá… ¿o quizás no le importó?
Nos preguntamos como familia, pero también invitamos a la sociedad Chaqueña a preguntarse:
¿Que tiene que pasar para que haya justicia?
¿Nuñez Barua debe dejar huérfanas a otras niñas?
¿Debe dejar incapacitadas a más personas?
¿Debe asesinar a más personas?
Estamos cansados de la impunidad de los hijos del poder, estamos cansados de no tener respuestas coherentes. Sentimos que el Estado Chaqueño se nos ríe en la cara cuando esta persona sigue en libertad poniendo en riesgo a otros ciudadanos y ciudadanas.
Como familia elegimos creer en la Justicia, por eso es al poder judicial a quien nos dirigimos en esta carta abierta
Nos encontramos a menos de cuarenta días hábiles para obtener la nueva sentencia, por eso insistimos en el pedido de JUSTICIA y de CONDENA DE PRISION EFECTIVA. Imploramos que de una vez los hijos del poder dejen de gozar de impunidad y/o penas vergonzosas para las víctimas y los familiares de las mismas”.