Además, autoridades del gobierno de la Ciudad detallaron la situación actual de las tareas referidas a la defensa norte, donde la aparición sorpresiva de un caño de gas natural se volvió un problema debido a la falta de documentación respaldatoria que frenaba los avances de las obras de desagües en esa zona.
La gestión municipal ya se puso en contacto con las empresas involucradas y se reclamaron las certificaciones necesarias y la capacitación técnica para evitar inconvenientes futuros y poder progresar con los trabajos.
El subsecretario de Servicios Públicos, Luis Alonso, explicó que “en octubre del 2020, y en el marco del programa de refuncionalización de desagües, esta gestión municipal tenía previsto desarrollar un canal primario de desagüe paralelo a la defensa norte, y sorpresivamente nos encontramos con el tendido de un caño de gas natural, cuya documentación en la Municipalidad era inexistente”.
En una misma sintonía, sostuvo que “encontrar eso fue una gran sorpresa teniendo en cuenta lo que implica el gas y la problemática que puede ocurrir en caso de operar sin conocimiento, como producir algún daño en la red”, y agregó que “desde octubre las tareas en ese sector de la urbe se encuentran suspendidas por la falta de documentación previa de la obra mayor de gasoducto, ya que no había ningún tipo de registro de esta acción”.
Asimismo, expresó que “esto se tuvo que hacer por las vías que corresponden, exigiendo tanto a la empresa propietaria del caño como a la empresa transportista, para obtener los papeles precisos y poder operar”, y amplió diciendo que “actualmente se está capacitando al personal municipal para saber de qué forma y como trabajar para seguir adelante con la obra que se requiere y para preservar la estructura existente”.
Sobre la continuidad de las tareas, manifestó que “los trabajos se retomarán cuando finalicen las jornadas capacitación y luego de recibir la documentación faltante de las partes, a partir de allí se estará en condición de poder dar respuestas, y esto será lo antes posible, siempre actuando con la premisa de resolver todas las cuestiones”.
En igual sentido, remarcó que “este es un problema que escapa a la voluntad del gobierno de la ciudad de Resistencia y a la capacidad operativa de nuestra área, y nos llamó poderosamente la atención porque se anarquizó el territorio y los organismos y entes que forman parte no participaron activamente”.
SOBRE LA OBRA DE DESAGÜE
Alonso especificó que “se tenía planificado realizar un canal primario de desagüe paralelo a la defensa norte, desde avenida Sarmiento hasta avenida Borrini, teniendo en cuenta que aproximadamente a la mitad del recorrido entre Sarmiento y la defensa norte, la pendiente de agua cambia el curso natural, lo que quiere decir que una parte desagua al sur y la otra al norte”, y añadió que “por lo tanto, se trabajó con los niveles topográficos puntuales para buscar las pendientes adecuadas que puedan acompañar ese volumen de agua”.
Además, indicó que “la idea era que este conducto principal desagüe sobre la avenida Borrini, que luego pasa al alcantarillado que existe sobre colectora de Nicolás Avellaneda y desagua directamente en el límite de San Buenaventura del Monte Alto y Villa Fabiana Sur para desembocar finalmente en el Río Negro”.