En razón de las declaraciones del intendente Gustavo Martínez responsabilizando a la oposición por un nuevo fracaso de la sesión, diputados de la UCR dieron a conocer una carta dirigida al jefe comunal.
Estimado Gustavo:
Algunos creen que cambiando de ropa y de peinado se convierten en otra persona y pueden confundir a los ciudadanos. Lamentamos decirle que no es así, como dice el refrán popular, aunque la mona se vista de seda, mona queda.
Usted es el mismo Gustavo Martínez que desde su banca como diputado, allá por el año 2007, le dijo a Capitanich que era un “delincuente de guantes blancos”, que tenía “vínculos con el narcotráfico lavando dinero para los carteles de la droga”. Claro que nunca radicó la denuncia formal en sede judicial, hecho que lo convierte en cómplice.
Usted es el mismo Gustavo Martínez que estando al frente de Sameep pagaba a proveedores sin documentación respaldatoria a través de cuentas sueldo, según consta en dictamen del Tribunal de Cuentas.
Usted es el mismo Gustavo Martínez que presidió SAMEEP entre 2008 y 2015. Durante todos esos años descontó del sueldo a los trabajadores el dinero correspondiente a aporte jubilatorio, obra social y fondo de alta complejidad pero nunca transfirió esos recursos al Insssep, la deuda hoy supera los $2000 millones.
Usted es el mismo Gustavo Martínez al que el Insssep recientemente intimó por la deuda que mantiene en concepto de aportes y contribuciones que retiene a los empleados municipales y no transfiere a la obra social ni a la caja de jubilaciones, deuda que supera los $200 millones.
Usted es el mismo Gustavo Martínez que no paga las facturas de Sameep ni de Secheep de la Municipalidad.
Usted es el mismo Gustavo Martínez que aplicó dos impuestazos a los vecinos de Resistencia y endeudó el municipio no sabemos para qué, porque la ciudad está a oscuras, un basural en cada esquina, calles destruidas, el tránsito es un caos, el servicio de transporte un desastre y la inseguridad que crece cada día.
Usted es el mismo Gustavo Martínez de siempre, con las mañas de siempre, por eso intenta responsabilizarnos del fracaso de la sesión sabiendo que el oficialismo tiene quórum propio, para aprobar una Ley se necesitan 17 votos y los suyos son 22.
Parece que esta vez lo timaron a usted. El problema no somos nosotros estimado Gustavo, son sus propios “compañeros” que a la hora de cumplir acuerdos electorales lo dejan solo.