La conferencia versó sobre “El juicio por jurados y el rol de las partes en el litigio de las instrucciones” y tuvo como responsables a Juan Pablo Chirinos (juez de ejecución Penal de Río Negro y docente de Criminología y Formación Insititucional en la Universidad Nacional de esa provincia) y Analía Reyes (secretaria del Tribunal en lo Criminal N° 4 del Dpto. judicial de La Plata y docente de Derecho Procesal I en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de LP).
Instrucciones con perspectiva de género
Reyes definió a las instrucciones, su función en el juicio por jurados y señaló la importancia, al momento de su elaboración “de tener en cuenta la perspectiva de género, sobre todo en aquellos casos donde las cuestiones de género están en discusión en el juicio y eventualmente pueda surgir la necesidad de tenerlas en cuenta para evitar en la decisión algún tipo de prejuicio, de sesgo o alguna mirada estereotipada del caso”.
“Una vez que se desarrolla la selección de jurados, el juez/a que dirige el juicio explica cuál es el rol del jurado como juzgador de los hechos, sus deberes, obligaciones, su rol en la definición de los hechos, y acerca de todo el desarrollo del debate. Quiénes son las partes del juicio, cuáles las garantías constitucionales, los derechos del imputado, y mención del derecho constitucional referido al estandar de prueba que se utiliza en el juicio por jurados donde la fiscalía tiene que intentar acreditar la culpabilidad más allá de toda duda razonable”, sintetizó, y añadió: “Se le explica al jurado qué se denomina prueba y de qué manera se la valora”.
“La instrucciones son para explicar la ley a quien no tiene conocimiento jurídico, por eso tenemos que hablar de manera clara”, sugirió.
Proyecto de instrucciones en la ley de Chaco
Chirinos destacó que “la ley de (juicio por jurados) de Chaco tiene algo muy interesante: que las partes pueden remitirle al juez antes del debate, o durante, un proyecto de instrucciones”, luego dio ejemplos de problemas en las instrucciones y “lógicas que se descuidan y no se explican bien en el juicio por jurados”. “El juicio por jurados es muy difícil, vayan en equipo”, recomendó.
La experiencia local
Del Río se refirió a los juicios por jurados en Chaco, y comentó acarca de las preocupaciones que surgen de la experiencia concreta “que es la debilidad de los sistemas cuando se ponen en marcha”, en éste, que “es un tiempo de aprendizaje”, señaló. “Estamos en equipos de trabajo a nivel nacional, generando un nuevo modelo de trabajo.Este fenómenos juradista nos ha unido a quienes trabajamos en este tema en el país”, indicó.
“Analizamos la forma en que nos comunicamos y notamos que los tecnicismos dicen poco y nos separan. Nos dimos cuenta de que lo que pensabamos que era un vocabulario que creíamos que sólo podíamos decir técnicamente, era posible que sea accesible”, aseguró. “A medida que avanzan las experiencias las partes se inmiscuyen más en establecer reglas en las instrucciones que el/la juez/a tiene que impartir al jurado. El/la juez/a tiene una gran tarea de dirección para dar una precisión fáctica y con consecuencia jurídica. Estamos en un camino inicial”, concluyó.