Luego del hecho que tuvo lugar en el colegio Don Bosco de Resistencia durante la semana pasada, el ministro de Educación, Aldo Lineras, analizó la situación y diagnosticó que se trató de una “locura”, en tanto que se mostró reconfortado por el repudio social ante la reacción de un grupo padres contra los estudiantes de la Escuela de Gestión Social N° 2.
“Me están consiguiendo material, porque no podemos dejar simplemente como que pasó. A la histeria y ese nerviosismo le vamos a contestar con un procedimiento, averiguando qué pasó y actuar en consecuencia con los que sean responsables de lo que le sucedió a los chicos”, manifestó Lineras este martes en comunicación con Radio Libertad, repudiando la actitud de los padres del colegio Don Bosco, y remarcó que “no discuto que uno disienta, sino el remedio aplicado a esa cuestión, que es el grito, el insulto, el ‘que se vayan’, no creo que eso ayude a una sociedad democrática, y creo que no tenemos que dejar pasar simplemente”.
“Hay diez ferias de ciencia por día, lo que hizo nuestro director regional está absolutamente respaldado, porque cuando uno invita a los colegios no puede haber discriminación”, explicó el funcionario, y sumó que “después, lo que sucedió allí lo tenemos muy claro, vamos a continuar trabajándolo. Entiendo la idea que padres rechazan y condenan lo que sucedió, y me parece que la lectura final de la sociedad es positiva, porque claramente todo el espectro social salió a condenar estas actitudes contra niñas y niños”.
En ese sentido, el ministro insistió en que “no es un episodio cerrado”, y adelantó que cuenta con una serie de audios que no puede ser divulgados públicamente, sin embargo, anticipó que “les han dicho negros de tal cosa y de tal otra. Es inaceptable”.
Respecto de las escuelas de Gestión Social que se posicionan en el ojo de la crítica, Lineras remarcó que estas están contempladas en la Ley 26.206 de Educación Nacional, frente a lo cual resaltó que “no las inventamos nosotros”. “Cuando uno invita a un evento invita a todas las escuelas, porque todas son públicas, lo que cambia es el tipo de gestión”, explicó, y comparó que tanto la escuela del barrio Emerenciano como el Don Bosco “reciben fondos con el mismo mecanismo para pagar sueldos, y el sistema de selección docentes también es el mismo”. “Duele que se haga una diferencia”, concluyó.