Por la tarde un hombre se dirigió a la Comisaría de Puerto Tirol y denunció que habían sustraído de su casa un reflector y un cable. Los agentes del servicio externo comenzaron averiguaciones por cercanías del lugar y los vecinos dieron detalles del implicado en el robo.
La información recabada los llevó hasta el Asentamiento San Francisco, allí se entrevistaron con un hombre de 33 años al quien exponerle los motivos de su presencia hizo entrega del reflector y el cable buscado.
Adujo que un conocido le había pedido que lo guarde, pero no sabía que los bienes eran sustraídos. Labraron acta de secuestro.
En la dependencia policial devolvieron los bienes al denunciante.