El delegado del Sindicato Único de Guardavidas y Afines (SUGARA) en el Chaco, Francisco Oporto, participó este miércoles del programa Toda la Info de Chaco Tv, donde dio detalles sobre la aplicación de la Ley Lourdes en la provincia. Junto a la Dirección de Trabajo se realizarán controles laborales en las instituciones que presten servicios de colonias de vacaciones o piletas de natación.
Oporto destacó la celeridad con la que se está implementando la normativa que fue sancionada en noviembre de este año, y que convierte al Chaco en la tercera provincia del país en tener una ley que regule la actividad de guardavidas en piletas de natación. “El guardavida es el único encargado en el cuidado de espejos de agua”, ponderó e indicó que junto al Ministerio de Gobierno realizarán controles para determinar la situación de cada institución.
“La idea es concientizar que primero contraten a un guardavida profesional”, expresó Oporto, y ratificó que se pedirá además que las instituciones cuenten con profesores adecuados con la cantidad de niños que asistan y que también haya estudiantes de educación física que colaboren. Aseguró: “La idea no es cerrar colonias. La idea es habilitarlas, pero con la seguridad necesaria”.
Detalló que en la provincia existen 120 profesionales matriculados, de los cuales solo 30 tienen contratación laboral. “Muchos están en situación de informalidad y el problema es que el guardavida es el único responsable”, sostuvo y agregó: “El guardavida es el profesional que tiene los conocimientos, los recursos técnicos y las habilidades para proceder cuando hay una víctima por ahogo”.
Sin embargo, Oporto dijo que la normativa establece que, en los lugares donde no hay guardavida, un profesor de educación física pueda tomar ese rol, con un curso de RCP y salvamiento previo. “Antes que nada, el primer respondiente acuático debería ser el profesor de educación física, porque tiene cátedra de natación, porque da algo de salvamento y puede proceder”, indicó.
“Nosotros tenemos a cargo el cuidado de lo más valioso de una familia, que son los niños”, reflexionó sobre la responsabilidad de los profesionales. Y remarcó la importancia de que los guardavidas cuenten con certificado que lo avale.
En este sentido, anticipó que trabajarán con el Gobierno provincial también para iniciar los cursos de guardavidas. “Necesitamos armar entre 200 y 300 guardavidas en la provincia”, sostuvo Oporto, al calcular que en el Chaco hay 120 piletas habilitadas y que se debería contar con dos personas por cada una de ellas.