“En Fundación Conin Chaco nos pusimos a trabajar por una infancia sana, previniendo y quebrando la desnutrición infantil; visionamos una provincia con igualdad de oportunidades, donde todos puedan desplegar su normal potencial genético y todos los niños puedan optar con libertad el camino a seguir”, resalta el doctor Adolfo Andreotti, desde entidad con sede en Barranqueras.
El 2021 comenzó en el Centro de Prevención y Formación Humana ubicado en la localidad portuaria con 40 familias. “Planeamos aumentar periódicamente la cantidad de niños hasta duplicar dicho grupo. Trabajamos en un edificio adecuado y en dos turnos que aspiramos alcanzar cinco turnos”, destaca el presidente de Conin Chaco.
Dada esa planificación para el año, Andreotti indica que el equipo necesita acompañamiento de coordinación, profesionales en medicina, enfermería, asistencia social, nutrición, un cocinero, estimulación, psicopedagogía, fonoaudiología, maestra de nivel inicial y auxiliares. Y también donaciones para mantenimiento, para lo cual se pueden realizar aportes en una cuenta bancaria (CBU 3110030211000038398089).
La Fundación Conin Chaco está ubicada en avenida 9 de Julio 5360 de Barranqueras. Allí, aplican la Metodología Conin (Cooperativa para la Nutrición Infantil) para superar las causas estructurales de la desnutrición infantil, desde su concepción y hasta los 4 años. Con esa premisa, la entidad invita a acompañar en la labor planificada para 2021. “Invito al pueblo chaqueño a ser parte del proyecto, a Ser Conin”, instó Andreotti.
En concreto, la campaña para convocar a voluntarios apunta a varias funciones: para trabajo en el Centro Conin; para colaborar con la organización difundiendo su trabajo y captando socios benefactores que aporten $500 o más por mes para solventar los gastos en el Centro; para dictar talleres; y para realizar tareas de transporte de carga hasta el Centro en Barranqueras.
Quienes puedan colaborar con esas tareas, pueden dirigirse a avenida 9 de Julio 5350, ciudad de Barranqueras; o comunicarse vía mensajes a los teléfonos 3624253869/ 3624242521.
La metodología Conin aplicada desde la sede de Barranqueras lleva 15 años. Repasando conceptos, Andreotti recuerda que se basan en los tres pilares: Educación, Asistencia e Investigación. “Nosotros trabajamos por y para superar las causas estructurales de la desnutrición infantil desde su concepción y hasta los 4 años, para construir una sociedad más próspera y mediante la promoción integral de grupos humanos, con personas que sean agentes de su propio desarrollo e inclusión social”, sostiene.
El médico subraya que “la inseguridad alimentaria indica un acceso inadecuado a los alimentos por alguna razón; conduce al hambre y, cuando éste se prolonga, lleva a desnutrición”. “La desnutrición da lugar a una alta prevalencia de niños con bajo peso al nacer y puede afectar negativamente a la producción de leche materna”, agrega. Así, señala que éstos efectos, a su vez, influyen en el desarrollo cognitivo, y neurológico de los hijos, lo que ocasiona menores logros educativos, y en consecuencia una menor probabilidad de encontrar un trabajo productivo en la vida adulta.
“Los sujetos afectados de maneras más graves, con desnutrición en su infancia, presentan menores aptitudes para trabajar, lo que reduce su capacidad; y así se puede continuar de una generación a otra, perpetuándose tanto las consecuencias biológicas de la inseguridad alimentaria como las consecuencias secundarias a la respuesta conductual a ésta”, advierte Andreotti.
En ese marco, dice que “el hambre es de difícil definición y fácil reconocerlo”. “La inseguridad alimentaria y el hambre son habituales en niños de familias con escasos recursos socioeconómicos. Los niños hambrientos también tienen mayor riesgo de sufrir un fracaso escolar, irritabilidad y conflictividad que otros con bajos ingresos, pero no hambrientos”, marca.
Es así como advierte que “los niños con desnutrición sufren salud deficiente, mueren tempranamente y presentan resultados peores en pruebas estandarizadas, no avanzan en la escuela, no tienen buenos vínculos familiares, sufren actitudes violentas, y acaban sin trabajos dignos, en pobreza y con destinos no deseables”.
En suma, resalta que “la seguridad alimentaria debe ser acompañada de una casa, calles transitables, acceso de agua potable, energía eléctrica, servicios cloacales, acceso permanente a educación y cultura familiar, de cumplir controles médicos”.
Planeamos aumentar la cantidad de niños hasta duplicar el grupo. Trabajamos en un edificio adecuado y en dos turnos que aspiramos alcanzar cinco.
LA PREVENCIÓN ES LA CLAVE
“El principal problema de la humanidad es la desnutrición infantil. El objetivo más importante del mundo debería ser la prevención de los problemas de aprendizaje en la infancia”, resalta Adolfo Andreotti.
En esa línea, plantea que “la desnutrición es el producto directo del subdesarrollo. Y es ahí a donde dirigimos nuestras acciones”. “Abordamos el tema en un frente amplio, pensando que, si asistimos solamente al niño que es de bajo peso y/o estatura, no solucionamos la desnutrición o mal nutrición en la infancia ni a corto ni largo plazo. En cambio, cuando incluimos dentro del tratamiento a la mamá provocamos un quiebre en el círculo vicioso de la pobreza, que tristemente suma, generación tras generación en las familias”, comenta.
Al revelar la metodología, Andreotti recuerda: “Tomamos a la mamá que tiene la estima baja, producto de sus carencias, de situaciones hostiles de su día a día, y ofrecemos herramientas para fortalecerse, a través de distintos talleres, en los que vuelca su potencial, en caso de tenerlo”.
“Comúnmente, las mujeres llegan carentes de ganas, de esperanzas, de planes. Eso nos demanda tiempo y paciencia, pero más tarde se suman a los talleres con ansias de superación, con proyectos nuevos, algunas por primera vez en su vida, y es ahí donde aprendimos que la verdadera pobreza es la carencia de proyectos, la de negar un sueño para el mañana”, repasa.
“Esa mamá es la que queremos que eduque, que alimente, que juegue, que sonría, que le muestre al hijo un mundo a través de sus ojos que ahora ven distinto”, subraya el titular de Conin Chaco en Barranqueras.
Así, agrega en mención al actual equipo de la entidad: “Esa mamá que aprende de nutrición y cocina con Sara y Emilia; que aprende a coser con el amor brindado por Ana y a pintar telas con Graciela; esa mamá que aprende de huertas hogareñas con Omar y Cintia; esa mamá que sabe, puede preguntar y contar con los brazos y oídos de Magua y Manuel; esa mamá que confía sus cuitas a Nicolás; todas ellas, que dejan sus hijos al cuidado de Romina y Rosana, y evaluaciones y estimulación de María Rosa y Cristina; y el examen y control de Irina y Mariano”.
FUENTE: DiarioNorte