Cultura

MUSICA: Leonardo Favio: 85° Aniversario De Su Nacimiento

Productor, director cinematográfico, guionista, compositor, cantante, actor. Arte.

Uno de los mayores precursores de la balada romántica latinoamericana; que sigue fascinando, mientras se redescubren sus interpretaciones una y otra vez.

Hoy, a 85 años de su nacimiento, cuatro temas – dos baladas, una balada beat, y el afamado primer Lado A, el vals “Mónica, mon amour…” – originalmente publicados en dos simples y grabados entre octubre y noviembre de 1969 con la orquesta de Marito Cosentino, llegan por primera vez a plataformas digitales en un compilado artístico histórico.

Canciones que, entre baladas, ritmos, gracias y anhelos, conforman un recorrido que va desde el descubrimiento a la pérdida del amor.

Cuatro canciones, cuatro caminos, que llevan, una vez más, al eterno Leonardo Favio.

Un poco de historia

De pequeño, Favio aprendió a tocar guitarra, intercambiando clases por trabajo.

Hoy día, sus canciones han sido versionadas en más de catorce idiomas.

Su debut como cantante le llevó a “La Botica del Ángel”, a manos de Eduardo Bergara Leumann.

Ese mismo día un ejecutivo de la CBS le propuso grabar un disco, resultando el primer sencillo de Favio: “Quiero la libertad”.

La productora le aconsejó grabar también “Fuiste mía un verano” y “O quizás simplemente le regale una rosa”; íconos de su primer álbum, titulado precisamente “Fuiste mía un verano” (1968). El disco resultó emblemático, constituyendo el más clásico de sus repertorios.

Tras su participación en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, en Chile, Leonardo consolidó su fama internacional.

“En ningún momento yo planifico bajar línea a través de mi arte, porque tengo miedo de que se me escape la poesía”.

En 1976 dejó Argentina, exiliado por la dictadura militar que sacudió al país hasta 1983.

Comenzó entonces una gira por América Latina, donde vivió casi dos años junto a su familia. Luego se estableció en Colombia, en la ciudad de Pereira, desde donde realizaba giras por varios países del mundo, interpretando sus afamadas canciones.

En cine ganó premios nacionales e internacionales, considerándoselo un director de culto exitoso y respetado. Sus películas “Crónica de un niño solo” y “El romance del Aniceto y la Francisca” han sido consideradas como las mejores de la historia del cine argentino.

Artista completo, innato e incansable, hijo de una madre escritora de radioteatros. Gracias a esto comenzó con sus incursiones actorales con pequeños bolos en Mendoza; etapa en la que además comenzó a preparar sus primeros libretos.

Mucho se puede decir de la vida y obra de un artista como Leonardo Favio, al que sólo queda agradecer por el aporte insondable de su Arte y su don de lucha.

Condiciones que lo hacen inolvidable, que lo vuelven presente, siempre, y en cada una de sus películas, en cada una de sus canciones.

“Tal vez en ese día Dios esté distraído, le sucede a menudo que se siente cansado; por eso es que te pido, no me llores ni reces, simplemente acaríciame mi amor, que yo estaré contigo”.