El hermetismo de las últimas horas por secreto de sumario ha aumentado la incertidumbre por las posibles derivaciones que tendrá la investigación a cargo de la jueza federal de Resistencia N°1 Zunilda Niremperger que este martes tomó declaración a Lorena Quintana, mano derecha de Rolando Vallejo y de su mujer Elida Mambrin.
El caso tiene resonancia porque las víctimas de una red de trata camuflada en la asociación civil precisaron nombres de personalidades públicas como políticos y periodistas entre los clientes que debían visitar.
La nueva procesada se abstuvo de declarar y fue señalada por varias beneficiarias de becas otorgadas por la provincia, como la que se dedicaba a elegir a las mujeres y presionarlas para que accedan a las propuestas sexuales del matrimonio.
Mientras Vallejo permanece prófugo con los pasos atrás suyo de fuerzas federales y de la Policía del Chaco, ayer por la mañana un abogado se constituyó como querellante de una presunta víctima de abuso sexual.
La joven de 24 años radicó la denuncia y a partir de su testimonio varias se animaron a denunciar al titular de la asociación “No Me Olvides” y además de ser ofrecidas a comunicadores sociales, exfuncionarios, funcionarios de distintos poderes del estado, aseguran que sufrieron abuso sexual por parte de Vallejo y Mambrin.
El trámite fue radicado ayer por el abogado Ítalo Suligoy quien pidió a la jueza que Vallejo, Mambrin y Quintana sean también acusados de abuso sexual gravemente ultrajante.
Al respecto la jueza confirmó esa presentación en las últimas horas y consideró que “abuso sexual podría ser considerado el delito de trata en concurso, porque en la causa de trata es con fines de explotación”, remarcó acerca de la posibilidad que ese hecho pase al fuero ordinario.
En ese sentido, Niremperger precisó que puede ser “un delito conexo a la trata de personas, considerado un delito federal y así lo establece la Corte la Suprema de Justicia”.
LAS AMEDRENTABA CON SACARLES BECAS
Al menos unas 70 mujeres beneficiarias de becas tenían dependencia con Vallejo y Mambrin, quienes manipulaban la necesidad de las mujeres, las que obligadas y necesitadas del dinero accedían a los encuentros sexuales a cambio de promesas de mercadería, bicicleta, moto y otras promesas.
Vallejo tenía habilitación por algún funcionario en cargo estratégico para otorgar becas y antes ponía sus condiciones: tal es así que las víctimas en las denuncias cuentan que si no aceptaban lo que él pedía, perderían la ayuda económica del Plan de Fortalecimiento Comunitario (FOCO).
LOS “CLIENTES PODEROSOS”
La jueza federal Niremperger ha demostrado por su paso en Sáenz Peña y ahora en la capital chaqueña no tener concesiones en casos tan aberrantes como la explotación sexual. Cuenta con libros escritos y varias condenas por el delito tipificado como otra forma de violencia de género.
La jueza está firme en su línea investigativa y siempre dispuesta a dar claridad a la sociedad sobre los hechos ventilados, pero se valió del secreto de sumario porque aún requiere más pruebas a recopilar y testimonios para que próximamente empiecen a desfilar los posibles “clientes poderosos” que debían atender las víctimas, en su mayoría las edades no superan los 27 años.
FUENTE: Diario Norte